Redacción Meridiano
Con el coronavirus aún campante por el mundo, son muchos los deportes que tuvieron que detenerse de forma definitiva y en algunos casos ni llegaron a iniciar, en ese último lote se encuentra el beisbol de Grandes Ligas. Sin embargo, un plan muy interesante, en el que la liga, jugadores y hasta funcionarios de salud pública de alto rango están involucrados, haría que la temporada comenzara nada más y nada menos que en mayo.
Según comenta el periodista deportivo Jeff Passan, tanto la MLB como la Asociación de jugadores idearon una estrategia, con la cual sanidad estaría totalmente de acuerdo, para que los juegos inicien en Arizona sin público. En ese sentido se utilizaría el Chase Field, campo de los Cascabeles, más otros 10 campos de entrenamientos para que todos los equipos puedan jugar.
De aceptar esa medida todos los jugadores deberán separarse un mínimo de cuatro meses de sus familias, debido a que estarán recluidos en Arizona. Además, deberá haber un aporte gigantesco del gobierno para otorgar pruebas del coronavirus y así mantener controlados en todo momento a los peloteros.
En lo que respecta al juego como tal, la idea es realizar dobles jornadas de siete innings cada una. También que los jugadores aprovechen las gradas vacías para colocarse allí y conservar la distancia reglamentaria entre ellos. Asimismo, habría una zona especial para los lanzadores entrenen solos si el mánager necesita un cambio. Otra medida es que los rosters serán extendidos para que los jugadores no se sobreexpongan ni se cansen tanto.
Para aplicar esto significaría que los equipos deberán entrenarse un mínimo de dos o tres semanas (a finales de abril o principios de mayo) y con eso estar en plena forma para iniciar la campaña en el mes planteado; aunque también se maneja junio como un mes más probable para tener todo listo.
El plan ya está armado y salud pública está de acuerdo. Ahora convencer a los involucrados será la tarea, que algunos ven imposible, para que cada fanático desde su hogar pueda disfrutar de una zafra más del deporte favorito en Estados Unidos.