Shohei Ohtani podría ser catalogado como la cara del beisbol en la actualidad y no solo revoluciona el deporte por ser un jugador que lo puede hacer absolutamente todo, también por estar en la cima como el jugador mejor pagado, principalmente por su valor de mercado fuera del campo.
La nueva pieza de los Dodgers de Los Ángeles, recibe un salario base que representa solo el 2% de sus ingresos totales, al solo percibir dos millones anuales, pero sus patrocinios y acuerdos comerciales son los que elevan sus ingresos, añadiendo $65 millones adicionales.
Con su dominio en el montículo y un bate poderoso, son una combinación única en él, por lo que Ohtani ha capturado la atención de los aficionados y el interés de las marcas globales. Su habilidad para generar ingresos lo pone en el tope de los mejores pagados de Las Mayores.
Mientras Ohtani continúa deslumbrando en el terreno de juego, su impacto financiero es igualmente impresionante. Es un recordatorio de que, en el béisbol moderno, los jugadores pueden alcanzar nuevas cimas financieras, no solo por cómo juegan, sino también por lo que pueden generar también fuera del campo.
El japonés lidera la lista de ingresos totales en las Grandes Ligas con sus $67 millones, superando por siete los $60 millones que percibe su compatriota Yoshinobu Yamamoto, quien cobra $55 millones de salario de los Dodgers, y solo cinco fuera del terreno.