Theoscar Mogollón González | @Theo_Mogollon
La Fórmula 1 regresará a territorio europeo este fin de semana con el Gran Premio de Emilia-Romaña, luego de cinco emocionantes carreras distribuidas por Asia, Oceanía y América. Sin embargo, la figura principal previo a la carrera ha sido la lluvia, pues ha colocado la región en estado de alerta por las fuertes precipitaciones e inundaciones.
Según informes meteorológicos, Emilia-Romaña ha sido azotada por las lluvias en las últimas semanas, lo que ha causado inundaciones en varios ríos de la región y provocando evacuaciones masivas, incluso con saldo de dos personas fallecidas.
Las previsiones para esta semana de antesala al Gran Premio que se correrá el próximo 21 de mayo siguen siendo críticas. Toda la zona se encuentra en alerta roja, tanto por las fuertes lluvias, como por las posibles inundaciones y hasta por los deslizamientos de tierra. De hecho, durante la tarde de este martes el personal del circuito de Imola debió ser evacuado ante el riesgo de inundación.
Te puede interesar: La F1 regresa a Italia: ¿Qué pilotos han ganado en el Gran Premio de Emilia-Romaña?
Los reportes para el fin de semana estiman que el clima mejore un poco, aunque las probabilidades de lluvia se mantendrán altas. Por ende, es más que seguro que el Gran Premio de Emilia-Romaña sea el primero del calendario 2023 que se corra sobre asfalto mojado.
Vale recordar que este tipo de carreras se ha caracterizado por la extrema prudencia de Dirección de Carrera. El año pasado, tanto en Mónaco como en Japón se vivieron retrasos de más de una hora luego de que el auto de seguridad tuviera que salir en la segunda vuelta.
A su vez, en el Gran Premio de Emilia-Romaña del 2022 también hubo una situación similar, ya que fue una carrera que estuvo pasada por agua. En ese entonces, la lluvia dejó su huella en la previa, obligando a que los pilotos utilizaran compuestos de lluvia. No obstante, el clima mejoró notablemente y conforme se fue secando el asfalto todos finalizaron con neumáticos de seco.