La UFC vivió el pasado 17 de febrero un cambio generacional en una de sus categorías reina. Ilia Topuria noqueó a Alexander Volkanovski, monarca de las 145 libras por más de cuatro años, convirtiéndose no tan solo en el nuevo rey del peso pluma sino también en uno de los rostros más emblemáticos de la promotora en la actualidad.
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El hispano-georgiano, conocedor de su capacidad de atracción mediática, agarró el micrófono tras su triunfo y volvió a pedir un pleito con toda una institución de las artes marciales mixtas: "Conor McGregor, si tienes pelotas, te espero en España", aseguró el flamante nuevo campeón que aspira a instaurar una hegemonía.
La respuesta no tardó en llegar
La respuesta de ‘The Notorious’, no tardó ni un minuto. Con la intención de volver al ruedo, pero sin fecha exacta para hacerlo, el irlandés aprovechó para demostrar a través de sus redes sociales que no hay ningún reto al que este se niegue.
McGregor, utilizó su cuenta de Instagram a través de una publicación de ESPN con la nota del reto del 'Matador': "Tengo pelotas enormes, tengo 4 hijos", respondió contundente.
“Después de proclamarte campeón, has pedido a Conor McGregor. ¿Por qué él?”, le preguntó el diario AS a Topuria en Anaheim. “Conor representa el último capítulo de la MMA. Entonces, para cerrar ya el capítulo y dejarlo en el olvido, es la pelea que yo quiero”, respondió ‘El Matador.
El recinto elegido
El desafío, a pesar de su magnitud tras la coronación de Topuria, no es algo nuevo. El hispano-georgiano compartió en sus redes sociales el 29 de diciembre la idea de enfrentarse a McGregor en España bajo el hashtag #ufcspain.
Ilia desea que la pelea, un evento de gran repercusión mundial y económica, se lleve a cabo en el estadio Santiago Bernabéu, casa del Real Madrid Club de Fútbol. Topuria está decidido a traer la UFC al país que lo acogió a los 15 años, y lo quiere hacer de manera espectacular. Tras convertirse en campeón del mundo, la posibilidad, confirmada por el presidente de la UFC, Dana White, está cada vez más cerca. Y McGregor parece estar dispuesto a aceptar el desafío.