César Sequera Ramos || @CSequera11
Todo bateador de las Grandes Ligas sueña con tener una temporada con .300 de promedio, 30 o más cuadrangulares y superar las 100 carreras remolcadas. Después de todo esa línea ofensiva tiene el balance perfecto de poder y consistencia que te convierten en un bateador élite.
Misma etiqueta que Miguel Cabrera y Carlos González buscan refrendar en la presente temporada. De mantener el ritmo hasta finalizar la campaña, ambos podrían superar la estelar línea ofensiva de .300/30/100.
El inicialista de los Tigres de Detroit luce con mayores posibilidades de hacerlo. En este momento Miguel Cabrera solamente necesita 13 carreras remolcadas para completar su octava zafra con tales numeritos.
Miguel Cabrera proyecta terminar el 2016 con .316 de promedio, 37 batazos de vuelta entera y 103 carreras remolcadas, estadísticas que frenarían el descenso de las últimas campañas y que lo colocarían nuevamente en lo más alto de las mayores.
“Todavía es uno de los mejores bateadores del planeta”, aseguró Brad Ausmus sobre Miguel Cabrera luego que hilvanara su décima campaña con más de 30 cuadrangulares y la primera desde 2013.
Mientras que Carlos González tiene un camino con mayor dificultades, sobre todo por el reciente slump ofensivo que atraviesa. Sin embargo, el jardinero de los Rockies de Colorado dio muestras de recuperación en el último encuentro y nuevamente proyecta conseguir la estelar línea numérica.
CarGo va encaminado a cerrar la zafra con .301 de average, 30 bambinazos y 104 impulsadas, estadísticas que superan la barrera, pero que no le dan mucho espacio para el error. Sería la segunda oportunidad que consigue esa línea ofensiva, luego que bateara .336 con 34 jonrones y 117 traídas al plato en 2010.
“Para eso es que uno trabaja tan duro”, afirmó Carlos González al Denver Post luego que consiguiera su quinto año con 25 o más cuadrangulares con el uniforme de los Rockies. Esa marca lo iguala con Larry Walker y Dante Bichette.