César Sequera Ramos || @CesarSequera11
De esas aperturas cuando Félix Hernández jugaba con los bateadores solo queda el recuerdo. Aunque todavía causa el mismo revuelo en la ciudad, la fuerza en el brazo no es la misma y su físico no tiene la misma resistencia.
Tampoco es algo extraordinario. La historia demuestra que el tiempo es invencible y las agujas del reloj seguirán moviéndose sin importar el nombre o talento de la persona. Todas estas metáforas solo intentan explicar el gran reto que enfrenta el “Rey” en su carrera: reinventarse como lanzador.
Con una recta que promedia 90.6 millas por hora, la estrategia de atacar bateadores no funcionará de la misma manera cuando las pistolas para medir la velocidad señalaban “95” o “96” continuamente. Ahora retar no es tan buena idea y un descuido se paga más caro.
“No es como antes cuando Félix podía caminar a un par de bateadores y borrar a los tres siguientes”, explicó el coach de lanzadores de los Marineros de Seattle, Mel Stottlemyre Jr. al Seattle Times. “Sabemos que eso no está ahí más y que no pasará”.
Es una de las razones del por qué no está siendo tan dominante, porque Hernández todavía está descubriendo cómo engañar a los bateadores con más fineza que potencia. “Muy dentro de él, sabe que no tiene las mismas armas del pasado”, agregó el instructor que trabaja arduamente con el venezolano.
Pero una de las principales razones por la que recibió el mote de “Rey Félix” es su instinto competitivo, ese que lo convierte en un lanzador especial con un Cy Young en su resumen curricular. “Sabe que todavía puede ser genial”, aseveró Stottlemyre Jr. “Solo que ahora tendrá que hacerlo diferente”.
El cuerpo técnico tiene varias recomendaciones para que “lo haga diferente”: 1) consigue buenos conteos para que el bateador no se sienta cómodo 2) obliga que hagan contacto para que no dependa de unos ponches que su poca velocidad no le permitirá conseguir 3) ignora los gritos de “K” (pedir ponche) que salen desde la “Corte del Rey”.
“Ponerse arriba en el conteo, lanzar bajo y conseguir un elevado al jardinero derecho. Eso es bueno también”, analizó el mánager, Scott Servais. “Me encanta la ´Corte del Rey´. Pero desde que se ponen de pie y empiezan a gritar por el ponche, Félix (Hernández) tratará de darles lo que quieren”.
Todo en la búsqueda del principal objetivo que tienen los Marineros y que los aficionados desean más que un pasado por los strikes: victorias. “Solo necesita descubrir un nuevo enfoque con el repertorio que tiene en la actualidad”, dijo el gerente general, Jerry Dipoto. “Necesita reinventar cómo poner sus lanzamientos en orden y confío que tiene el orgullo suficiente para mantener su legado”.
Es por eso que en Seattle quedaron tan satisfechos por la última salida de Félix Hernández, donde trabajó por espacio de 6 entradas, permitiendo solamente 2 inatrapables y consiguió que “todos mis envíos” funcionarán. “Hice algunos ajustes y tuve la capacidad de hacer buenos pitcheos”.
Quizás puede ser el primer paso en su reinvención o un paso uno en falso que lo obligue a seguir intento; solo el tiempo lo dirá, mismo que lo está obligando a luchar contra ese reto.