Max Verstappen afronta el próximo Gran Premio de Qatar con el título de la Fórmula 1 prácticamente en la mano. El neerlandés cuenta con una ventaja de 177 puntos sobre su compañero de equipo, Sergio "Checo" Pérez, el único que podría arrebatarle el campeonato, a falta de 180 puntos por disputarse en seis carreras restantes.
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La victoria de Verstappen en el Gran Premio de Japón, la 13ª de la temporada, fue el golpe definitivo que dejó sentenciada la lucha por el título. El triunfo de Red Bull, además, le valió para asegurar matemáticamente su sexto Mundial de constructores.
Las opciones de que Verstappen no se proclame campeón en Qatar son ínfimas. A pesar de que repartirán 34 puntos en esta próxima cita, el neerlandés solo necesita salir con 146 puntos de margen con su compañero. Checo necesitaría ganar el domingo y que Max no sume ningún punto para mantener vivas sus opciones. En cualquier otro escenario, Verstappen se proclamará campeón en el desierto de Oriente Medio.
El neerlandés podría incluso celebrar su corona el mismo sábado, día de la Sprint, si acaba, como mínimo, quinto en la prueba reducida. En el peor de los escenarios, con un octavo puesto o noveno y la vuelta rápida el domingo, también dejaría sentenciado el campeonato.
Verstappen se convertirá así en el tercer piloto más joven de la historia en lograr tres títulos mundiales, tras Lewis Hamilton y Sebastian Vettel. El neerlandés también entrará en el selecto club de los tricampeones del mundo, ese que capitanea Ayrton Senna y en el que Fernando Alonso estuvo a punto de entrar en, al menos, dos ocasiones, pero sin éxito.